Capítulo.7

Esta mañana me desperté con agujetas por todo el cuerpo, decidí bajar a desayunar y subir otra vez a mi habitación, por que mi abuela me había prohibido salir de la cama hasta que se me curara la contractura del brazo que me hice hace unos días.
mientras bajaba por las escaleras,la escuché hablar por teléfono.
-¿Ya te has despertado? justo a tiempo, tu padre quiere hablar contigo- mi abuela me dio el teléfono y se fue a la cocina.
-¡¿Papá?!- Estaba contenta de hablar con el, no nos veíamos desde hace 5 días.
-¡Aby!,¿como estás cariño? tu abuela me ha dicho que te has hecho una contractura en la muñeca, ¿estás bien?- Me dijo
-No te preocupes papá,andaba despistada y tropecé,la abuela me dijo que querías decirme algo-
-Así es,Aby...hoy me han ascendido un puesto más en la empresa..y..-
-¡Eso es genial!- Le interrumpí
-Tendrás que quedarte un tiempo más en la granja, intentaré que me transladen a casa pronto, pero mientras tanto deberás estar con tu abuela,lo siento...sé que no te gusta ese lugar-
-No... bueno,tranquilo, estaré bien, es más...este sitio empieza a gustarme,pero por favor, vuelve pronto-
-Lo intentaré-
Después de conversar un rato me despedí.
El lado positivo era que podía seguir investigando este lugar.
-Abigayl,¿quieres acompañarme al pueblo? necesito comprar para la cena de esta noche.
-Claro...espera, voy a vestirme- Prefería salir a respirar aire puro que quedarme encerrada en mi habitación sin ningún entretenimiento.
Mientras bajábamos la colina se me resbalaban un poco los pies a causa de la escarcha.
-Va a nevar pronto, probablemente esta noche caerán los primero copos- mi abuela rompió el silencio.
-Me haría mucha ilusión ver nevar, donde yo vivo solo llueve.
Cogimos un atajo y llegamos unos minutos antes al pueblo, yo ayudaba a mi abuela a sujetar las bolsas.
-Espérame aquí un momento, tengo que entrar a por unas cosas.- me dijo.
Mientras esperaba en la puerta de la tienda, me encogía para entrar en calor, pero no era suficiente.
-Hola,¿esperas a alguien?- Una voz salió del otro extremo de la tienda y se acercaba a mi. Era un chico, tendría aproximadamente mi edad, alto,no sabría decir si rubio oscuro o castaño claro.
-Ho..Hola..Mi abuela está dentro, la estoy esperando.- contesté...me daba mucha vergüenza, no se me daba bien hablar con chicos.
-¿No tienes frío?- Me preguntó. Me hablaba como si nos conociéramos desde toda la vida.
-¿Quién eres?- Fui un poco borde, pero no sabía como reaccionar.
-¡Ah! perdón que no me haya presentado, Soy Athan,¿Y tú?- M e preguntó con una sonrisa.
-Abiayl...aunque me llaman Aby.- Pude observar que tenía unos grandes ojos pardos.
-¿Aby? pues encantado.- volvió a sonreír.
No le contesté y bajé la cabeza.
Mi abuela salió de la tienda.Él enseguida se despidió y se fue.
-Por lo que veo conoces a Athan, es el hijo del alcalde, es guapo, ¿verdad?- Me dijo mi abuela con sonrisa pícara.
-Si...vino..y me habló..ya está...-Le contesté.La verdad, Athan tenía una sonrisa realmente bonita.
Al llegar a casa me eché en la cama y no me levanté hasta la hora de comer.